Las empresas de conserjes en Madrid son contratadas normalmente por:
- Comunidades de propietarios y vecinos
- Edificios de empresas y oficinas
- Parques empresariales y tecnológicos
- Urbanizaciones
- Polígonos insutriales
- Centros comerciales
- Aparcamientos privados, entre otros.
Puede que la figura del conserje o portero no se considere indispensable a priori, pero cuando está se nota. Además, en grandes comunidades con variedad de servicios, como piscina, amplias zonas ajardinadas, garajes y almacenes, su trabajo es indispensable.
Servicios de conserjería que prestamos
- Atender y orientar a las visitas, sean particulares en una comunidad de vecinos o clientes y proveedores en un edificio de oficinas o empresas.
- Toman nota de los avisos y se hacen cargo de la gestión de la correspondencia.
- La conserjería incluye la revisión de las instalaciones para comprobar que todo está en orden.
- Tareas básicas de limpieza, reparación y mantenimiento: retirada de basuras, cambio de bombillas, comprobación de rejillas, detección de humedades…
- El conserje es también el responsable de custodiar las diferentes dependencias del edificio, el que guarda las llaves de las zonas comunes y controla quién hace uso de ellas y en qué forma.
A ello se pueden sumar otras tareas que se han considerado convenientes, como un control de acceso más riguroso, la gestión y reparto de paquetería, las tareas preventivas de mantenimiento…
Prestamos servicio de conserjería en Madrid capital y toda la Comunidad de Madrid.
Si está conocer nuestros servicios sobre conserjería en Madrid, puedes contactar con nosotros sin compromiso para cualquier duda a través de nuestro formulario de contacto.
Empresas de conserjería en Madrid
Nuestros conserjes reúnen todas las cualidades que se esperan de un conserje:
- Atención y habilidad: para que las incidencias se puedan detectar y ser corregidas a tiempo, hace falta alguien que realmente ponga interés en su trabajo. Nuestra selección de personal es muy cuidada y, además, supervisamos tareas con regularidad para comprobar que así es. Además, es fundamental contar con un mínimo de conocimiento para la limpieza efectiva y las reparaciones que haya que acometer.
- Voluntarioso: un conserje debe tener ganas de ayuda a los trabajadores o vecinos, prestar un servicio a los demás es su vocación. Y todo con el trato que merecen.
- Resolutivo y comunicativo: el conserje resuelve porque sabe cómo hacerlo y porque escucha. El trato con las personas que entran y salen del edificio es una constante, así que debe estar siempre abierto al diálogo.